¿Qué es la procrastinación?
Esencialmente, es posponer algo que deberías estar haciendo. Esto puede ser cualquier cosa, desde lavar los platos hasta comenzar ese proyecto de trabajo o ir al gimnasio.
¿Procrastinas?
Si es así, no estás solo. De hecho, alrededor del 20% de las personas se identifican como procrastinadores crónicos.
Hay diferentes teorías sobre por qué las personas posponen las cosas.
Para algunos, es una forma de autosabotaje. Es posible que no se sientan seguros de su capacidad para completar la tarea, por lo que la posponen.
Otros pueden posponer las cosas porque son perfeccionistas. Quieren hacer la tarea a la perfección, por lo que siguen posponiéndola hasta que tengan más tiempo para hacerlo «mejor».
Cualquiera que sea la razón, la procrastinación puede tener un impacto negativo en tu vida.
Según las investigaciones, la procrastinación puede contribuir a que se desarrolle estrés, ansiedad e incluso depresión. Además, de afectar tu rendimiento laboral o escolar y, por consiguiente, tu autoestima.
Como verás, las procrastinación se desarrolla, y puede desarrollarse, por múltiples factores. Asimismo, puede desencadenar mayores complicaciones y repercutir en nuestra salud mental.
Si eres un procrastinador crónico, hay algunas cosas que puedes hacer para tratar de romper el hábito.
Trata de identificar por qué estás procrastinando y qué puedes hacer para abordar esas tareas. Si no es posible para ti hacerlo solo quizás sea momento de tomar terapia con un profesional de la salud mental.
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